Rosca de reyes

En media taza de leche tibia disolver la levadura con dos cucharadas de la misma harina destinada para la masa con 1/4 de cucharadita de azúcar.

Mezclar perfectamente hasta que quede como un atole espeso. Reposar en un lugar tibio por 15 minutos a que duplique su volumen.

Batir la mantequilla con el azúcar, añadir 6 huevos, el agua de azahar y después la harina cernida, alternando con la leche; batir hasta que quede una masa que no se pegue en las manos.

Añadir la levadura ya crecida, volver a batir; cuando despegue, vaciar en un recipiente ligeramente engrasado con aceite y deja reposar una y media horas o hasta que duplique su tamaño, en un lugar tibio.

Amasar suavemente y dividir la masa en tres partes; extender cada una y formar las roscas, poniéndoles el muñequito dentro.

Colocar en charolas engrasadas y reposar una hora en un lugar tibio para que se esponjen. Batir el huevo que nos queda y barnizar las roscas. A cada rosca se le hacen cinco cortes con tijeras, y en ese lugar se le coloca un poco de una masita preparada con la harina de trigo, azúcar glas y manteca de cerdo; espolvorear azúcar granulada una vez que se ha colocado el adorno.

Decorar con rebanadas de la fruta cubierta. Meter al horno caliente a 200°C durante 15 minutos y 10 minutos más a 150°C.