Hay momentos en que nuestros niveles de estrés y ansiedad suben. Los motivos pueden ser diversos y casi siempre, estos estado de ansiedad afectan nuestro apetito. Ya sea que no sintamos hambre, o bien, que nuestra ansiedad por comer aumente. Si te encuentras en este último caso comienza a implentar estas sencilla acciones que ayudan a calmar la ansiedad por comer
- Practica meditación. La meditación es muy beneficiosa para reducir el estrés y la ansiedad, entre otras cosas y practicarla un par de veces al día, una por las mañanas y otra por las tardes, hará que sin ninguna duda, nuestra ansiedad por la comida disminuya e incluso desaparezca, si somos constantes.
- Un buen descanso. Es muy importante tener un buen descanso porque eso hará que nuestro organismo produzca más leptina, hormona que se encarga de dar la orden a nuestro cerebro de que estamos satisfechos.
- Aumenta las proteínas. Un buen consumo de proteínas ayudan a mantenernos más saciados, por ello, cada vez que hagas una comida incluye, siempre que sea posible, algo de proteína.
- Desayuna bien. Realizar un buen desayuno es fundamental y más cuando tenemos ansiedad por la comida. Debemos incluir alimentos integrales y fruta en todos los desayunos, además de proteína.
- Toma hierbas relajantes. Las infusiones de té verde, manzanilla o valeriana, son buenas para relajarnos y reducir la ansiedad que deriva en ansiedad por comer. Si eres de las personas que tienden a comer mucho en la noche, toma una infusión por la tarde y antes de dormir. Esto reducirá tu ansiedad y te relajará a la hora de ir a descansar.
- Bebe abundante agua. Los expertos dicen que en realidad el organismo no necesita tanta comida como la que se consume en la sociedad actual y que la mayoría de las veces que tenemos sensación de hambre, lo que realmente tenemos es sed. Entonces, cuando te de hambre, antes de ponerte a comer sin control, bebe un vaso grande de agua.
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