Cómo comer para ayudar a combatir el estrés

El estrés es una situación que aunque está cimentada en nuestras emociones y en un momento particular que estemos viviendo, tiene repercusiones profundas sobre todo nuestro cuerpo, efectos que no son sólo a mediano plazo, sino que pueden afectar a nuestra salud hasta mucho tiempo después de haberlo padecido.
Por eso es tan importante aprender a prevenir y controlar el estrés, y poderlo minimizar en nuestras vidas.
Planear nuestras actividades, no asumir demasiados compromisos personales o de trabajo, y aprender a salir con tiempo a nuestras citas, son todas estrategias de prevención de estrés.

La respiración profunda y pausada; las técnicas de focalización y relajación son también importantes en el control y prevención del estrés físico y emocional, pues ayudan a relajar los músculos, enfocar la mente en cuestiones positivas y a promover un correcto descanso.
Se define estrés como la disrupción del balance o bienestar físico y emocional de la persona. Puede ser de corto plazo, causado por una circunstancia especial, o de largo plazo, causado por un estilo de vida o un “hábito”. Algunos síntomas del estrés incluyen:
* Aumento en la frecuencia cardiaca, elevación de la presión arterial, hiperventilación, dolor estomacal, vómito, dolor abdominal, dolor de espalda, cambios en los hábitos urinarios y de defecación; dolor de cabeza, dermatitis, acné; contracturas musculares y tensión en los músculos.
* Cuando el estrés se vuelve crónico y no se maneja adecuadamente puede tener importantes repercusiones en la salud, que incluyen:
a) Sobrealimentación o anorexia, alimentación por atracón, insomnio, cansancio crónico, sueño interrumpido y otros problemas del sueño; diarreas y estreñimientos alternados, colitis y gastritis; dolor de cabeza tipo cinturón, dermatitis, nerviosismo y ansiedad, alteraciones en el ciclo menstrual, asma y alergias.
b) Algunos cambios que nos pueden ayudar a combatir y prevenir el estrés, en los diferentes ámbitos de nuestra vida, incluyen:
* Desde el punto de vista emocional:
-Expresa tus sentimientos.
-Resuelve problemas personales pronto.
-Desarrolla un sentido de éxito y logros.
-Comenta tu desempeño con tus allegados.
* Desde el punto de vista de buenos hábitos de vida:
-Ejercicio regular.
-Relajación después de la comida.
-Relajación antes de dormir.
-Buenos hábitos de sueño.
-No tener demasiadas actividades.
-Ingiere tu primera comida del día temprano (2 horas máximo).
-Come más seguido (3 comidas y dos refrigerios cada 4 horas cada una).
-Elige alimentos ricos en antioxidantes y vitaminas del complejo B:
-Frutas y verduras frescas.
-Nueces y otras oleaginosas.
-Verduras de hoja verde y cereales integrales.
-Y ricas en calcio, hierro y potasio:
-Lácteos, tortilla y pescados con esqueleto.
-Verduras verdes, leguminosas y carnes rojas magras (yema de huevo).
-Jitomate, guayaba, plátano o naranja.
-Y por supuesto, bebe suficiente agua pura y cristalina.
* Trata de evitar el consumo excesivo de:
-El efecto “montaña rusa” causado por los azúcares simples.
-El alcohol.
-La nicotina.
-La cafeína.
-Los medicamentos para el dolor.
-Otros fármacos.