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Incondicionales en el cine

Incondicionales en el cine, las palomitas son un secreto hecho en México

Las palomitas de maíz son indispensables cuando se visita una sala de cine. Su sabor salado, consistencia crujiente y adictiva hacen que sin importar el tamaño, el envase que las contiene quede vacío al final de la función. Su consumo no se limita al relacionado con el cine, en cualquier lugar y momento una bolsa […]

Las palomitas de maíz son indispensables cuando se visita una sala de cine. Su sabor salado, consistencia crujiente y adictiva hacen que sin importar el tamaño, el envase que las contiene quede vacío al final de la función. Su consumo no se limita al relacionado con el cine, en cualquier lugar y momento una bolsa de palomitas de maíz es la botana perfecta para calmar el hambre.

Deliciosas, tradicionales y universales, las palomitas de maíz son un snackheredado de las culturas precolombinas al mundo entero y por supuesto en el México Prehispánico eran comunes e igualmente disfrutadas. Este aperitivo se hace de granos de maíz especiales, los cuales son tostados en una olla y fritos en aceite vegetal hasta que explotan de forma curiosa.

Solamente el maíz reventón es capaz de transformarse súbitamente en una masa esponjosa y blanca. Claro que actualmente existen palomitas que se pueden preparar en horno de microondas para beneficio de todos. Sobre su historia, se cree que los españoles a su llegada al nuevo mundo fueron recibidos con collares hechos de palomitas de maíz y también se fabricaban sombreros y corpiños de este producto, cuestión que no es poco probable, ya que en estas culturas se dominaban todas las técnicas para preparar maíz.

En México las rosetas de maíz se vendían a granel en los mercados y se preparaban al momento en grandes ollas ardientes o sobre ceniza a muy altas temperaturas.

En náhuatl se llamaban momochtli. Con la llegada de los españoles las deliciosas palomitas fueron conocidas en muchos lugares del mundo y han estado presentes desde hace siglos, aunque su consumo se popularizó en 1913, ya que empezaron a venderse como botana en salas de cine, aderezadas con mantequilla y sal o con caramelo.

Crujientes y eternas las palomitas de maíz son otra de muchas delicias hechas en México y en otros países latinoamericanos que han cruzado fronteras y se han posicionado hasta en los lugares más recónditos del planeta. Espero que les haya gustado esta nota y disfruten las palomitas, ah no, de la película.


Nota de

Cocina con Alegría

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