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El rebote en las dietas

El rebote en las dietas, ¿cómo evitarlo?

Muchas dietas que se ponen de moda nos ayudan a bajar rápido de peso. Perdemos hasta cuatro kilos en una o dos semanas y terminamos la dieta muy orgullosos y sintiéndonos mucho mejor. El problema está en que, al paso del tiempo, recuperamos el peso perdido y muchas veces, hasta ganamos un poco más. A […]

Muchas dietas que se ponen de moda nos ayudan a bajar rápido de peso. Perdemos hasta cuatro kilos en una o dos semanas y terminamos la dieta muy orgullosos y sintiéndonos mucho mejor. El problema está en que, al paso del tiempo, recuperamos el peso perdido y muchas veces, hasta ganamos un poco más. A este fenómeno se la llama coloquialmente “rebote” y es muy común y muy desalentador…. Para evitar el rebote, podemos brindarte algunas estrategias sencillas que te ayuden a seleccionar la dieta correcta y la velocidad para bajar de peso, de una vez y más definitivamente.

Qué tipo de dieta
Lo mejor es elegir una dieta que contenga alimentos de todos los grupos de nutrimentos; una dieta que incluya cereales como el arroz, pan o pasta, abundantes verduras y frutas, y alimentos de origen animal como carnes, aves y huevos en preparaciones magras, o sea bajas en gasas; además de lácteos descremados y una porción de leguminosas todos los días como frijoles cocidos, lentejas o garbanzos.

Las dietas restrictivas, que prohíben algunos alimentos o se centran solo en unos pocos, así como aquellas dietas que solo permiten consumir un grupo de alimentos como las altas en proteínas de origen animal y bajas en hidratos de carbono, logran pérdidas de peso efectivas, pero son más propensas al «rebote».

La velocidad de la pérdida de peso
Lo ideal es bajar de peso lentamente para permitirle a tu cuerpo a adaptarse al nuevo peso y restringir el consumo de 500 kcal diarias para lograr una pérdida de peso de 500 gramos por semana, o máximo, cuando la dieta anterior era muy excesiva y no se realizaba actividad física, de 1 k por semana.

Las dietas que te ayudan a bajar varios kilos por semana o más de tres por mes, tienden a tener rebote porque el cuerpo no se adapta fácilmente a una pérdida de peso tan dramática.

La transición cuando se «acabe «la dieta
Cuando termines de perder el peso deseado, es importante que sigas midiendo las porciones consumidas y evaluando la calidad de tu dieta. A esta etapa se le llama mantenimiento y es fundamental que sea muy cuidada y supervisada para mantener el peso perdido y los nuevos hábitos adquiridos.

También es sumamente importante seguir realizando actividad física y mantener los hábitos alimentarios como la dieta fraccionada, el consumo del desayuno, la correcta hidratación o el consumo de refrigerios, a media mañana y media tarde, adquiridos durante el periodo de pérdida de peso.


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